Buscar en BA-LON-CES-TO

martes, 11 de octubre de 2016

Reglamento de Baloncesto (7): Tiempo muerto

Por Jorge

La temporada 2016-17 en el baloncesto ACB viene marcada por la aplicación más estricta de la falta antideportiva frente a la denominada falta táctica que se utilizaba para cortar contraataques. Una buena noticia para el espectáculo aunque ello no dejará de provocar algunas polémicas como no puede ser de otro modo en un deporte en el que la interpretación arbitral juega un papel tan relevante.

Sin embargo me alegro por esta novedad, y propongo, algunos me llamarán tiquismiquis, que esa mayor rigurosidad también se aplique con la duración de los tiempos muertos, que es ese y no otro, el tema de esta entrada, y es que antes de que se vaya por ese camino, bueno es aclarar que pasa si se hace un uso irregular de la duración del tiempo muerto.

Vaya de antemano que quien quiera conocer todas las vicisitudes sobre la solicitud de un tiempo muerto, cuándo se concede y demás, basta con que se acerque por el artículo 18 del reglamento.

En dicho artículo se especifica que cada tiempo muerto dura un minuto, y éste “comienza cuando el árbitro hace sonar su silbato y realiza la señal de tiempo muerto” y “finaliza cuando un árbitro hace sonar su silbato e indica a los equipos que vuelvan al terreno de juego”. Sencillo.

Sin embargo, cualquiera que haya visto un partido en directo no ya en baloncesto profesional, que sin duda, sino hasta en el baloncesto de formación y en el amateur, raro es el tiempo muerto que dura sólo un minuto. Y no digo que haya que ir cronómetro en mano, pero es que en la mayoría de las ocasiones ese tiempo casi, y sin el casi, se dobla, alargando en demasía la duración de los partidos, para que luego la extraordinaria jugada que diseñó el entrenador se vaya al garete cuando su equipo no sea capaz ni tan siquiera de poner el balón en juego (es un ejemplo que cualquier aficionado habrá visto muchas veces).

Igual que existe un reglamento FIBA, existe un conjunto de interpretaciones de las reglas con una serie de ejemplos que pretenden servir para aclarar a los árbitros (y al resto de la gente del baloncesto) diferentes situaciones más o menos comunes que se pueden vivir durante un partido.

El caso es que si uno revisa las interpretaciones del reglamento FIBA al respecto de la duración del tiempo muerto, se dice lo siguiente:
“En ocasiones un equipo prolonga el tiempo muerto más allá del minuto asignado, obteniendo una ventaja por prolongar dicho tiempo muerto y ocasionando una demora en la reanudación del juego. El árbitro debe advertir a ese equipo. Si el equipo no reacciona al aviso, se cargará otro tiempo muerto al equipo infractor. En caso de que no dispusiese de más tiempos muertos, puede sancionarse una falta técnica por retrasar el juego al entrenador (tipo ‘C’).”
Todos hemos visto la escena que una vez que la mesa de anotadores hace sonar la bocina (o el silbato en categorías menores) para reanudar el juego, los árbitros se acercan, uno a cada banquillo, para hacer sonar su silbato y recordar de nuevo que se vuelve al juego. Y visto así, la verdad que es complicado determinar cual de los dos equipos prolonga el periodo del tiempo muerto pues en realidad lo son los dos en una especie de regla no escrita.

Igual que se ha llegado a cierto consenso ahora por la falta antideportiva para el caso de la falta táctica, mi propuesta es que se estableciese con algo más de rigurosidad la duración de los tiempos muertos, y de no cumplirse dejar sin tiempos muertos a los equipos, que tampoco es que favorezcan especialmente el espectáculo, y teniendo en cuenta la más que probable baja estadística de éxito de ejecución de lo que en ellos se dice (éste podría ser un buen tema de estudio) tampoco creo que perjudicaría, más bien al contrario, al juego.

Y conste que todo esto lo dice un entrenador que pide pocos tiempos muertos, y de los que pide le sobra la mitad del tiempo, que prefiero que se dedique para descansar y beber, pues reconozcámoslo, en la mayoría de las ocasiones los jugadores (y a veces los propios entrenadores) no se enteran de nada, y para dar un par de indicaciones y animarles tampoco es necesario tanto tiempo. Y en el baloncesto profesional, si tan bien están entrenados, con refrescar ideas es más que suficiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido a BA-LON-CES-TO.

¡Muchas gracias por hacer tu comentario!