Buscar en BA-LON-CES-TO

sábado, 16 de febrero de 2019

Historia de la Copa

Por Jorge

El pasado jueves comenzó, a mi juicio, la cita anual más importante del baloncesto español: la Copa. Una fiesta del baloncesto que no tiene nada que envidiar a cualquier otro evento baloncestístico mundial y que además reúne un notable componente competitivo.

Desde el punto de vista de la fiesta, hoy sábado se reúnen las aficiones de los equipos que la juegan, en un ambiente deportivo que para sí quisieran demostrar en otros deportes. Deportividad que también reina de manera general en las gradas durante la celebración de esta competición.


Al componente deportivo desde un tiempo a esta parte se sumó la Minicopa, eso sí, en un ámbito más lúdico, no olvidemos que los jóvenes que la disputan están en categoría infantil y por tanto en formación, sin embargo también permite ver la evolución de la cantera del baloncesto español… e internacional, pues en un mundo globalizado como en el que vivimos, muchos de los equipos presentan también jugadores extranjeros formados aquí. No olvidemos que por esta competición pasó Luka Doncic o algunos jugadores que actualmente juegan en la competición sénior.

Al hilo de esta Copa que se juega en Madrid, el aficionado puede pasar hasta mañana por CaixaForum (Paseo del Prado, 36) para ver una sencilla exposición fotográfica (gratuita) que reúne instantáneas cedidas por la Fundación Pedro Ferrándiz y ACB Photo, y que resumen todas las ediciones anteriores de este torneo.

La muestra incluye una fotografía por cada edición de la Copa, pudiéndose distinguir las imágenes en color correspondientes a la etapa de la competición bajo el control de la ACB, y las que son en blanco y negro que se corresponden a la etapa anterior, y que a buen seguro harán las delicias de los seguidores del baloncesto más veteranos que de este modo podrán conocer parte de la historia de nuestro baloncesto.

Así esta exposición permite conocer que el Rayo Club fue el primer campeón de Copa ganando al Madrid Basket-ball (denominación por entonces de la sección de baloncesto del Real Madrid de fútbol) en 1933. Curiosamente esa final se disputó en una ubicación muy cercana al Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid, sede de la presente edición, en los Jardines del Cine Goya. Por supuesto, entonces la competición se jugaba al aire libre y sobre una pista de tierra. Y es que así fue durante mucho tiempo y en campos de lo más curioso como plazas de toros y frontones: en el Frontón de Recoletos en 1936 y 1941, en el Frontón Balear de Mallorca en 1943, en el Frontón Fiesta Alegre en Madrid... Y también en una terraza de una nave industrial del centro de Barcelona en 1945, en la Plaza de Toros de Las Arenas también de Barcelona en 1946, y nuevamente en esta plaza en 1950 pero ya en una pista de madera instalada allí para la ocasión. Por cierto, en 1960 se disputó en la mítica Nevera estudiantil (al aire libre y no cubierta como está ahora, claro).

La segunda final se jugó en 1935 en una pista de tierra batida en la montaña barcelonesa de Montjuic y ganó el Société Sportive Patrie, un equipo fundado por una colonia francesa que hubo en la ciudad condal. Y es que ver la exposición permite también conocer muchos equipos que hoy en día ya no forman parte del baloncesto español como los dos campeones mencionados hasta ahora, y otros con nombres llamativos como el Juventus Sabadell, o el CD Galicia, equipo orensano que fue uno de los primeros equipos gallegos en jugar la Copa en 1943.

El formato de competición de la segunda edición fue el de una final a seis, y es que también hasta llegar al sistema actual de los ocho mejores equipos al final de la primera vuelta de la liga ACB, se pasó por diferentes opciones, como por ejemplo un sistema de liguilla y por tanto sin final como tal en la edición de 1949 que ganó el Barcelona.

La Copa llevaba disputadas ochenta y dos ediciones previas a la presente, y la exposición también permite conocer que se disputó en numerosas localidades donde hoy en día parece impensable que vuelvan a disputarse como por ejemplo en el Club de Campo de Vigo, sede de la fase final en 1956 (edición 21) que ganó el Madrid al Aismalíbar, club mítico de los orígenes del baloncesto español, fundando en 1947 en Moncada y Reixach (Barcelona).

Y es que también la Copa pasó por Lugo en 1964, Salamanca (1965), Terrassa (1966), Gijón (1968), León (1970), Jaén (1975), Cartagena (1976), El Ferrol (1980), Almería (1981)…

Este recuerdo me lleva a reivindicar que se acabe con el anacronismo que actualmente supone que el anfitrión (y hasta dos como en esta edición de 2019) deje de ir a la Copa como tal. En otro tiempo quizá era necesaria su presencia para garantizar cierto éxito económico, pero hoy en día esta competición tiene el interés de las aficiones de todos los equipos participantes que desplazan a multitud de seguidores más allá de aquellos que quieren disfrutarla independientemente de los equipos que la disputen. La Copa tienen que jugarla los ocho mejores de la primera vuelta de la ACB, y de este modo llevarla también a localidades menos habituales para difusión del baloncesto, si bien en este punto reconozco que no es fácil encontrar instalaciones que puedan albergar al gran número de aficionados que se desplaza para disfrutar de esta competición.

También la exposición en este repaso fotográfico permite conocer al que sin duda debería como el jugador “rey de copas”, que no es otro que el legendario Alfonso Martínez, cuya historia merece muy mucho la pena ser conocida, y que fue finalista con nada más y nada menos que cinco equipos distintos, ganando el título con cuatro de ellos: Real Madrid (1957), F.C. Barcelona (1959), Picadero de Barcelona (1964) y Joventut de Badalona (1969). Sólo perdió la final que disputo con el Aismalíbar en 1956.

Además de poder ver a los pioneros del baloncesto español y a quienes nunca les podremos estar lo suficientemente agradecidos por permitir el crecimiento de nuestro deporte en tiempos tan difíciles como los vividos en los orígenes, la exposición recoge fotos de algunos míticos como Pepe Laso, padre del actual entrenador del Real Madrid, cuando entrenaba a Baskonia en la Copa de 1973, Epi fotografiado en 1978 disputando la competición en su Zaragoza natal en el primer título del Barcelona de una racha de seis consecutivos, Fernando Martín durante la disputa de su primera Copa como madridista en 1982, o Aíto García Reneses en la edición de 2016 cuando cumplía 50 años en la élite del baloncesto español.

Otra curiosidad que se puede conocer es que el Real Madrid se retiró de la competición de Copa en semifinales en 1983, y casi más curioso todavía es que ese año se vivió la disputa de dos finales, y es que la Copa de la temporada 1982-83 se jugó en abril, y la de la siguiente temporada (83-84) lo hizo en diciembre de ese mismo año, y ya esta vez bajo el control de la ACB (Asociación de Clubes de Baloncesto, para quienes desconozcan el significado de tales siglas) que una vez fundada el 11 de septiembre de 1983, relevaba a la Federación Española de Baloncesto (FEB) como organizador de la Liga Nacional.

Y por último resaltar la que me parece como la fotografía más curiosa de la exposición, y es la que se corresponde al año 1984 donde posan juntos después de la disputa de la final tanto ganadores (Real Madrid) como perdedores (Joventut de Badalona), y donde se puede ver a Fernando Martín y Jordi Villacampa abrazados y sonrientes para la ocasión, y con la anécdota que recoge el pie de foto que dice que Corbalán regaló su reproducción de la copa a un “mopero” local que lloraba la derrota de su equipo, y es que la final se jugó en el mítico Ausiàs March de Badalona.

La sencilla pero interesante exposición fotográfica se remata con los testimonios e imágenes de los protagonistas de la historia de la Copa gracias a un videoproyector, y por supuesto está coronada con el trofeo de la competición.

Insisto en la recomendación de su visita, y espero que sea una cita habitual de todas las sedes que estén por recibir la celebración de futuras copas, porque nunca está de más recordar la historia de esta competición, que no olvidemos que vio jugar a leyendas de otro tiempo, y más recientes como Bodiroga, Sabonis, Scola, Navarro, Pau Gasol…

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido a BA-LON-CES-TO.

¡Muchas gracias por hacer tu comentario!