Buscar en BA-LON-CES-TO

viernes, 23 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (32) Heat 115 Lakers 107

Por Jorge


En el día que Shaquille O´Neal, leyenda de ambos equipos, veía retirada su camiseta con el número 32 de los Heat (curiosamente luciendo en sus manos un anillo de campeón de Lakers), Miami consiguió una victoria en el día de la marmota de L.A. que repitieron el mismo guión que en su partido anterior frente a los Hornets.

Lakers tomaron el mando en el marcador con un parcial de 11-0 de inicio y con 10 puntos de Mozgov acabaron con ventaja en el primer cuarto (17-25).


Luego el segundo cuarto comenzó con una jugada de 4 puntos de Young, y entre él y Lou Williams (11 puntos) y Russell (8) con dos triples cada uno, mantuvieron la ventaja al descanso (53-60) frente a unos Heat que se mantenían en el partido con Whiteside haciendo daño en la pintura anotando10 de sus 14 puntos en ese cuarto.

Los Lakers tuvieron hasta 19 puntos de ventaja en el segundo cuarto (23-42), pero después de la ceremonia de retirada del número de O´Neal nuevamente vivió el equipo otro descalabro más, por no saber cerrar un partido que tuvieron controlado la mayor parte del tiempo, y van ya unos cuantos esta temporada.

Young con 11 puntos (tres triples) en el tercer cuarto aguantó el empuje de Miami que tuvo sobre todo a Justin Winslow como su referencia ofensiva en este tiempo, encargándose de poner a su equipo por delante por primera vez a falta de un minuto para finalizar este periodo, y que terminó liderando su equipo con un parcial final de 16-4 (82-80).

El último cuarto fue un intercambio de canastas que favorecía a Miami que estaba por delante, y el ataque pasó a estar en manos de Williams que anotó 14 puntos pero no fue suficiente para que L.A. recuperase la iniciativa en el marcador.

Así los Lakers dejan escapar otra victoria con una lamentable segunda parte (20 puntos anotados en el tercer cuarto y 33 encajados en el último) después de jugar un buen inicio, por no saber controlar el partido, y no sé a que detalles se referirá Walton, pero seguro que alguno será evitar que tu “estrella” del pasado draft se duerma en los laureles, y sin ningún tipo de presión defensiva pierda la pelota por no pasar medio campo en menos de 8 segundos.

Los Lakers no pudieron contar con el lesionado Nance ni con Randle de viaje a L.A. para asistir al nacimiento de su hija, y los mejores fueron Young (20 puntos con 5 triples) y Williams (27), que no pudieron hacer frente a los 21 puntos de Dragic y sobre todo los 23 puntos y 13 rebotes tanto de Whiteside como de Winslow (máxima anotación de su carrera).

Felices navidades baloncestísticas

El lagunero se toma un descanso hasta después del periodo navideño para volver con más ganas el próximo año, momento en el que habrá que analizar los próximos partidos, y hacer balance de la mitad de temporada.

Hasta entonces desear feliz Navidad a todos los aficionados al baloncesto, en especial para quienes siguen BA-LON-CES-TO, y particularmente para todos los seguidores de Los Angeles Lakers. Sigan disfrutando del juego, y no olviden que la jornada de Navidad es uno de los platos fuertes en estas fiestas:

Leer más

miércoles, 21 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (31) Hornets 117 Lakers 113

Por Jorge


Otro partido que se tira por la borda después de una primera parte notable, y una segunda lamentable, que combinó desacierto y mala defensa frente al despertar de los Hornets.

El primer cuarto con D´Angelo Russell de vuelta en el quinteto inicial para anotar las dos primeras canastas del equipo, los Lakers demostraban un destacado acierto en el tiro, con muchos jugadores implicados en la ofensiva: Young (8), Deng (7) y Jordan Clarkson con un par de triples entrando desde el banquillo, para anotarse 41 puntos. Y ese nivel de acierto se mantuvo en el segundo cuarto con otros tres triples de Clarkson para llegar al 59-73, máxima anotación de L.A. al descanso en lo que va de temporada.

En cuatro minutos del tercer cuarto un parcial de 16-4 para Charlotte igualó el partido, y lo que parecía que podía ser una victoria cómoda se convirtió en otro desastre defensivo encajando 35 puntos en ese cuarto, que sin embargo terminó dos arribas para el equipo de Walton (94-96) gracias a un arreón de Randle.

En ese tiempo se vivió el segundo toque de atención del entrenador de Lakers, el primero fue en el segundo cuarto, a Russell y Randle, que de vuelta a la cancha en una y otra ocasión, su mala defensa y falta de producción ofensiva les mandaba al banquillo apenas un par de minutos después de entrar en pista.

Pero lo peor en ese cuarto fue la lesión de Nance. En la pelea de un balón se le fue la rodilla ligeramente y habrá que esperar el resultado de las pruebas médicas que le hagan. Esperemos que no sea grave, pero las lesiones que se producen sin contacto con otro jugador suelen ser las peores. Veremos.

El caso es que en el cuarto periodo Lakers volvió a liderar el marcador, con varios triples más de Clarkson (7 de 9) y con Russell y Randle más entonados, pero al final el desacierto y varios triples de Belinelli empataron el partido a falta de un minuto. Y luego Batum anotó la canasta decisiva, Young erró el triple ganador, y luego el francés certificó la victoria de los Hornets con un par de tiros libres.

El mejor en Charlotte además de Batum (23 puntos y 10 asistencias) fue Kemba Walker (28 puntos, 10 asistencias y 8 rebotes), y en los Lakers junto a Clarkson (25 puntos) destacó Young (24 en 27 minutos). Y la carita al final del partido de Walton demostraba que esta gira fuera de L.A. de momento está siendo pobre en resultados, y quizás necesite más toques de atención para que algunos de sus jugadores se pongan las pilas.

Leer más

domingo, 18 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (30) Cavs 119 Lakers 108

Por Jorge


Derrota que entraría dentro de lo esperado, por ser Clevenland vigentes campeones y candidatos al título, pero que duele porque el equipo estuvo metido en partido en todo momento y sólo una nueva pájara en los últimos tres minutos (1 de 8 en tiro para un parcial en contra de 11-3) cerró las opciones de remontada.

El partido comenzó con los Lakers tomando la delantera en el marcador frente a unos Cavs confiados que daban la sensación de jugar a medio gas. Pero al inicio del segundo cuarto se produjo la desconexión ofensiva-defensiva de L.A. que encajó un parcial de 12-0 y no anotó sus primeros puntos hasta pasados más de tres minutos de ese periodo. Luego los angelinos se sobrepusieron hasta el 62-59 de la media parte gracias a la anotación de Randle (16) y Young (15) que hacían frente a Kevin Love (12) y Kyrie Irving (14 puntos, 5 rebotes y 9 asistencias al descanso).

La segunda parte fue un tira y afloja con intercambio de canastas de uno y otro equipo con Jordan Clarkson, Deng y Young manteniendo a los Lakers en la ofensiva y dejando el resultado en el aire hasta que se decidió con el parcial final ya mencionado.

No es la primera vez que los Lakers tiran por la borda un intento de remontada a base de un concurso de triples (6 de los últimos 8 tiros). Walton quiere jugar con “pequeños”, pero por mucho que reciba los elogios de LeBron James…

…quizá una solución o por lo menos otra posibilidad sería jugar más balones interiores para al menos tener opciones de dentro-fuera y conseguir una mejor selección de tiro y buscar algo más de equilibrio en el juego.

Clarkson con 20 puntos (7 de 12 en tiros) y Young (32 con 8 de 14 en triples) fueron los mejores de Lakers, donde también destacó el casi triple doble de Ingram (9 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias), que jugó más de 40 minutos saliendo de titular en el base en lugar de un D´Angelo Russell ausente por problemas en su rodilla izquierda.

LeBron James se quedó con 5 puntos al descanso fallando tiros a priori fáciles para él, y curiosamente no jugó los minutos finales de la primera parte, algo poco habitual en la rotación de los titulares en el baloncesto NBA. Sin embargo en la segunda parte pasó a dominar el partido y pese a su pobre porcentaje en los tiros libres (6-11), su estadística final es digna de la superestrella que es: 26 puntos (con un triple a falta de 2.32 puso el 113-105 que sentenció el partido), 7 rebotes y 9 asistencias, completando el trío de estrellas con Irving (21 puntos y 12 asistencias) y Love (27 puntos y 17 rebotes).

Leer más

sábado, 17 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (29) Sixers 89 Lakers 100

Por Jorge


Los Lakers volvieron a la senda ganadora, rompiendo una racha de ocho derrotas seguidas, con una cómoda victoria en cancha de los flojos Sixers (6 de 31 en triples).

El triunfo se cimentó en un parcial inicial de 0-13, con 7 puntos de Russell más el empuje de Randle, y el equipo no perdió jamás la delantera en el marcador.

Luego ese buen hacer continuó con el trabajo del banquillo liderado por Lou Williams que anotó 12 puntos en 10 minutos en la primera parte.

Al final del tercer cuarto el desacierto ofensivo y las pérdidas de balón metieron en el partido a los de Philadelphia, pero el intercambio de canastas del último periodo benefició al equipo angelino, y Randle, el mejor del partido con 25 puntos, aseguró con los tiros libres finales una victoria que debería servir para tranquilizar un poco al equipo durante esta gira por el este.

La verdad es que lo mejor de los Sixers estuvo en el homenaje, al inicio y el descanso del partido, de su legendario jugador Allen Iverson, agasajado por su inclusión en el “Salón de la Fama” del baloncesto.

La buena noticia para los Lakers, además de la victoria, estuvo en la vuelta de Tarik Black, que jugó algunos minutos del segundo cuarto tras su lesión, y suma una pieza más en la rotación interior del equipo.

Leer más

viernes, 16 de diciembre de 2016

Historias de un Aficionado (3): el exceso de confianza

Por Jorge

A aquellos aficionados que hayan jugado regularmente al baloncesto seguramente les sonara el extraño caso del amigo con exceso de confianza.

Cuando la gente con la que se juega tiene poca experiencia, es decir, poco tiempo de juego, se puede comprender la creencia de que se puede hacer cualquier cosa que se quiera en una pista de baloncesto. Sin embargo, con el tiempo, llama la atención la dificultad que tienen algunos para ser conscientes de sus limitaciones, y distinguir sus virtudes y aprovecharlas (si las tienen), y no estorbar o desaprovechar las que tienen aquellos con quienes juegan.

Recuerdo en mis inicios pachangueros la vergüenza y el temor que me propiciaba entrar a jugar con gente más mayor y experta a la que veía jugar, y que me parecía que lo hacían mejor que yo, o al menos con más soltura. Recreos donde te quedabas mirando como los jugones del instituto jugaban, y te fijabas en los detalles, anhelando el día en que fueras el que estuviese jugando en el patio. Y ese día llegó, te veían mirando, o tal vez estabas en otro aro, sólo, tirando a canasta y faltaba uno para completar equipos…

Y al principio te bastaba con poder jugar, esforzándote a tope, sobre todo en defensa, y pasando, pasando mucho la pelota, para que viesen que no querías protagonismo, que sabías aceptar tu papel de pipiolo hasta que alguien te daba la suficiente confianza para que te atrevieras a tirar a canasta, pero sin abusar, sólo de vez en cuando… hasta que con el paso del tiempo te convertías en el veterano que ya podía actuar a su antojo, y no digamos ya si encima jugabas bien.

Volvamos al comienzo, que me lío, el caso es que no hay pachanga en la que no falten esos que sin ser jugones se apropien de virtudes que no tienen, intentando jugadas que vieron el otro día en los “highlights” que da el telediario, sin darse cuenta que para ellos poder hacerlo sólo es posible con la consola de los videojuegos.


Y si traigo a colación esto es porque me acuerdo de un amigo, dudo que me lea pero mejor omitiré su nombre por si se siente ofendido, que siendo capaz de encestar algún triple de vez en cuando, era capaz de jugárselos con tal confianza que uno no acertaba a entender como era posible que no los anotara más a menudo dada esa seguridad en sí mismo. Y así lo sufrí en mis carnes pues compartiendo equipo, daba igual que tuviese a un par de buenos triplistas (triplero me llamaron en mis inicios) a cada lado totalmente abiertos, que se la jugaba irremediablemente en un afán de no sé que protagonismo acabando habitualmente ese tiro en un sonoro clon contra el aro o incluso si tan siquiera tocarlo en alguna ocasión.

Hace poco decía Iturriaga en un artículo sobre la seguridad que tiene en sí mismo Sergio Llull que “la confianza debe tener (…) una buena relación con la realidad. Porque si no, se convierte en temeridad. Nada hay más peligroso para un equipo que un jugador cuya confianza saque unas cuantas cabezas a su talento o porcentajes. Porque esto quizás le haga meterse en berenjenales para los que no está preparado, o para los que hay otros en mejor disposición”.

Afortunadamente el baloncesto es un deporte democrático que si bien favorece a algunos con mejores condiciones físicas, puede ser jugado por cualquiera… aunque no todos puedan hacer las mismas cosas sobre la pista. Así que para aquellos con exceso de confianza, por favor, bajen a la tierra, y dedíquense a hacer lo que mejor saben hacer, y dejen hacer a otros lo que ellos si saben hacer mejor.

Leer más

jueves, 15 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (28) Nets 107 Lakers 97

Por Jorge


Pobre acierto en el tiro (38%) para unos Lakers que desaprovecharon la oportunidad de romper su racha perdedora en una cancha propicia como la de los flojos Brooklyn Nets.

El primer cuarto estuvo marcado por las tres faltas de D´Angelo Russell, mostrando una vez más su inoperancia defensiva, y por el parcial de 9-0 final liderado por Jordan Clarkson para poner al equipo por delante en el marcador (27-30).

El segundo cuarto fue horrible para ambos equipos con multitud de fallos y errores, pero en el que los Nets gracias a un par de triples finales y que los Lakers no metían una ni en una piscina (sólo un acierto en sus últimos catorce tiros) lograban remontar el resultado al descanso (52-43).

En la reanudación el equipo de Luke Walton espabiló gracias a varios triples de Russell y Nick Young (sigo alucinando, para bien, con su actitud defensiva), y el empuje de Luol Deng, y se logró finalizar el tercer cuarto por delante (75-76).

Sin embargo en el último periodo volvió el desacierto (los diez últimos tiros de campo fallados) y los Nets se aprovecharon para conseguir la victoria apoyados sobre todo en el juego de Lopez (20 puntos) y Bogdanovic (23). El mejor en L.A. fue Mozgov con 12 puntos y 13 rebotes (7 ofensivos).

Triste es que la única nota de color que se resalta de este partido para los Lakers sea en el extraordinario mate de Larry Nance jr. del tercer cuarto sobre Brook Lopez, y que después de otros que ya hizo en el pasado, seguramente le lleven a participar en el concurso de mates del próximo “All Star Weekend” para seguir la tradición procedente de su padre, el primer ganador de este concurso allá por 1984. Por cierto, es muy espectacular, pero vale solo dos puntos, los mismos que valieron la siguiente canasta fácil bajo el aro por parte de los Nets.

Leer más

miércoles, 14 de diciembre de 2016

El lagunero opina… Balance del primer tercio de temporada

Por Jorge

Mientras los Lakers están ya en Nueva York para jugar la próxima madrugada su siguiente partido en Brooklyn, es buen momento para ponerse al día, repasando algunos detalles de los partidos jugados la semana pasada contra tres equipos de su conferencia: (23) Utah Jazz, (24) Houston Rockets, y (25) Phoenix Suns. Y también para hacer balance del primer tercio de la temporada.

Seguramente contra Utah, teniendo en cuenta que es un equipo más fuerte de lo que pueda sonar al aficionado medio, se jugó el mejor baloncesto de estos tres partidos. Aguantando hasta la primera parte en el marcador, pero dejando la ofensiva casi exclusivamente en manos de Lou Williams, y sin poder parar a la pareja interior francesa de los Jazz: Diaw-Gobert.

Luego en Houston, el equipo acusó más otra nueva baja (Tarik Black), y jugando al pim pam pum con los Rockets difícil es tener opciones ante una batería ofensiva tan amplia como tiene el equipo de James Harden. A destacar que pese al festival anotador (134-95) el partido no dejó de ser una “castaña” pero que caracteriza estos tiempos del baloncesto NBA con ataques de muy pocos segundos al estilo “aquí te pillo aquí te mato” en el que los Lakers sumaron su récord de pérdidas de la temporada (27) y los Rockets no se quedaron cortos con otras 20 en un correcalles inaguantable.

Williams aparte (consiguiendo grandes marcas anotadoras saliendo desde el banquillo), el mejor, o al menos el que más ganas le puso en Houston, y en general en estos tres partidos fue Mozgov. Llamando la atención su facilidad para incorporarse rápidamente a la transición ofensiva, pero sobre todo que sea el primero en hacer el balance defensivo del equipo, siendo esto último una muestra de que la defensa de Lakers es muy pero que muy floja no ya en las transiciones, sino también en los bloqueos directos o en cualquier otra situación del juego.

Después de sus pasos por la liga de desarrollo y debido a las bajas, Zubac subió con el primer equipo, y en un partido con muchos minutos de la basura incomprensiblemente apenas jugó 5 minutos. ¿Cómo se espera que crezca este joven jugador si no juega?

Por último en el Staples frente a Phoenix el equipo se mantuvo en el partido pero siguió lastrado por su defensa (Bledsoe y Barbosa desde el banquillo les hicieron un traje) viviendo de arreones ofensivos puntuales.

Cada uno de estos partidos dejó detalles poco esperanzadores de cara a lo que estar por venir. Y si bien las lesiones son una buena excusa en cualquier momento, no lo es menos que después de haber jugado un cuarto de temporada, querer jugar ataques rápidos en un equipo joven sin mucha cabeza (tradúzcanlo por conocimiento del juego) y olvidarse de la defensa, no parece la mejor combinación posible aunque al principio de curso los resultados fueran positivos.

Recientemente L.A. se enfrentó a los Knicks y el que escribe volvió a rasgarse las vestiduras al comparar a Russell y Porzingis, más si cabe después de leer una información sobre los motivos que llevaron a los Lakers a elegir a uno en lugar del otro.

Está claro que la reconstrucción de un equipo mítico y legendario en cuanto a títulos no es fácil, y buena opción es el draft, pero no se puede elegir a la ligera, y los Lakers no parece que estén muy afortunados ni que parezca que el futuro sea tan bueno para sus elecciones pasadas y ni siquiera para la más reciente.

Esta temporada, hasta la fecha, Brandon Ingram está jugando 27 minutos por partido que ya los firmaría cualquier rookie antes de empezar la temporada. Y en ese tiempo anota 8 puntos, coge 4 rebotes y da 2 asistencias. ¿Son esos números de un número dos del draft? No lo parece. Venía con fama de ser un buen tirador de media distancia, pero lo cierto es que hasta ahora no mete una: 38% en tiros de dos y 30% en tiros de tres. Si esto era lo mejorcito que había el curso pasado en la NCAA, no hace sino demostrar que el nivel de la liga universitaria estadounidense es cada día más bajo.

Verdad es que hay que tener paciencia con un jugador que no deja de ser un niño que saltó demasiado pronto al baloncesto profesional sin terminar su formación, y desde luego sin el nivel físico adecuado más allá de su envergadura. Su peso no está para jugar en la NBA, incapaz de cerrar el rebote, y saliendo muy mal parado en cualquier penetración a canasta por mínimo que sea el contacto con el defensor.

La esperanza es que quizá pueda crecer y ayudar al equipo jugando como base, que es la posición que ocupa en muchos casos, aunque de momento sólo le sirva para subir la bola cuando bien podría aprovechar su tamaño jugando más al poste bajo.

Querer jugar ataques rápidos es una buena manera de hacer partícipes a todos en la ofensiva, y desde luego la salida de Clarkson y Williams desde el banquillo parece una decisión acertada, pero en un equipo que demostró dificultades para llevar el tempo de partido (saber cuando correr o cuando jugar en media pista para sacar ventajas) debido a su bisoñez y falta de liderazgo, quizás sería mejor idea pensar más en la mejora defensiva, que por momentos parece dejada en manos del azar. Por último, decir que se echa en falta más contraataque en un equipo joven con piernas frescas.

Sigue siendo pronto para juzgar el proyecto de Luke Walton, y seguro que la vuelta a la normalidad con la recuperación de los lesionados ayudará a mejorar los resultados, que viniendo de donde se viene se pueden considerar como aceptables, pero parece que hace falta algo más si realmente se quiere pelear incluso por entrar en los playoffs.

Por cierto, curioso vídeo el anterior en el que se ve a Young y Russell en un entrenamiento durante su tiempo de convalecencia. Parece que ni los responsables de las redes sociales del equipo confíen en sus propios jugadores, y es que la cámara se centra en sus movimientos sin que se vea si aciertan o no.

Leer más

martes, 13 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (27) Kings 116 Lakers 92

Por Jorge


Otro saco al carro de defensa de los Lakers que más allá de las lesiones empiezan a tener síntomas de frustración ciertamente peligrosos. Signos que se demuestran con la expulsión de su entrenador, Luke Walton, con ocho minutos jugados del primer cuarto.

Y es que se entiende que quiera defender a sus jugadores, y que demuestre su enfado porque Demarcus Cousins, uno de los malas pulgas de la liga, campe a sus anchas con menos castigo del que merecería por su cabeza y malos modos, pero sobre lo que subyace tal vez la incapacidad de mejorar el carácter defensivo de su equipo más allá de su bisoñez.

El caso es que Lakers llevaba con cierto control el primer cuarto gracias al buen hacer ofensivo de Mozgov y Young, y con el lío de la doble técnica a Walton más otra a Randle los Kings empataron el partido, y después de un inicio errático anotaron once de sus últimos doce tiros de campo para meter 31 puntos en el primer cuarto.

Luego pese a la escabechina de Sacramento en la pintura de L.A. (30 puntos hasta el descanso en la zona), con mejor defensa encabezada por Thomas Robinson (que veremos si luego juega con la vuelta del lesionado Black), y la anotación de Deng y Russell con un par de triples cada uno, los Lakers tomaron una clara ventaja al descanso (49-58).

Sin embargo a la vuelta en la segunda parte muy pronto los Kings igualaron el partido, y en el tercer cuarto se conjugó una ofensiva nefasta y una defensa aún peor para el equipo dirigido ahora por Brian Shaw, y con un parcial de 39-13 el partido quedó visto para sentencia.

La mejor noticia del partido la dejó la vuelta ofensiva, esta vez sí, de Russell con buenos porcentajes para ser el máximo anotador del equipo con 17 puntos, aunque su defensa siga siendo un coladero para cualquier base de la liga.

Mal inicio de gira fuera del Staples para los Lakers que ahora tiene su más largo y duro recorrido por el este (Brooklyn, Philadelphia, Cleveland, Charlotte, Miami y Orlando). Si no cambia la mentalidad defensiva el varapalo puede ser fuerte y acabar, aunque parezca pronto aún, con sus aspiraciones de jugar playoffs.

Leer más

lunes, 12 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (26) Lakers 112 Knicks 118

Por Jorge

El lagunero vuelve para dar buena cuenta de los partidos de Lakers. Ya habrá tiempo de repasar los jugados frente a rivales del oeste: Utah (23), Houston (24) y Phoenix (25), pero lo más reciente es lo ocurrido anoche contra los Knicks.


Sexta derrota seguida de Lakers que no aprovechó el pobre partido de Carmelo Anthony (4 de 16 en el tiro), y a quienes las lesiones descompensaron el equipo alejándole del sueño del playoff aunque la pasada madrugada volvieron con tiempo limitado Nick Young y D´Angelo Russell.

Buena primera parte por ambos equipos sin apenas pérdidas de balón (sólo 5 al descanso) y buenos porcentajes, sobre todo en los Knicks con un estupendo Rose con 5 de 5 en el primer cuarto al que trataron de hacer frente Young (6 puntos) y Deng (2/3 en triples) en ese tiempo.

Lakers se mantuvo en el partido hasta el descanso (56-57) pese a la exhibición de Porzingis en un lado y otro de la cancha. En ataque anotando desde el triple y por dentro, y en defensa cerrando el aro con sus tapones (7).

En el tercer cuarto el equipo de Walton tuvo uno de sus habituales colapsos ofensivos (sólo 19 puntos) y sólo los arreones de Luol Deng, el más regular anoche anotando su mayor puntuación de la temporada (22 con 5 de 8 en triples), y el empuje de Nance llevaron incluso a que Lakers se pusiera por delante en el marcador en el último cuarto (87-86).

Sin embargo sólo fue un quiero y no puedo gracias a un par de triples decisivos de Brandon Jennings que se sumaron a tres pérdidas de balón de Williams (11 en total para el equipo angelino en la segunda parte).

Young en su vuelta al juego estuvo bien (15 puntos en 20 minutos), mientras que Russell se limitó a perder balones (4) y fallar tiros (1/8) pese a su intento por empezar fuerte el partido que le llevó a fallar sus primeros 5 tiros incluyendo un tapón de Rose jugándole al poste bajo.

Tal vez hoy sea ventajista por el hecho de que el base de Lakers sale de una lesión y Porzingis jugó un partidazo (26 puntos y 12 rebotes), pero cada vez que veo jugar al letón, me hago cruces sin entender porqué L.A. prefirió en el draft al base zurdo, que siendo un buen jugador, ya dudaba entonces, y ahora más, no creo que alcance el nivel de juego del ala-pívot.

Leer más

domingo, 11 de diciembre de 2016

Los mejores números 13 de la historia de la NBA

Por Jorge

Ciento setenta y siete jugadores utilizaron este número a lo largo de la historia de la NBA (y de la ABA), de los que once lo hacen en el presente curso, como Paul George (Indiana Pacers) que después de su grave lesión hace dos temporadas decidió cambiar a este número, y que de mantener su nivel a buen seguro entrará en este ranking en el futuro.

Comparado con otros números ya vistos en esta sección, no es de los más utilizados por los jugadores: ¿tendrá algo que ver la superstición? Y entre las curiosidades, sólo fue retirado en honor de cuatro jugadores, siendo uno de ellos Bobby Phills (Charlotte Hornets 1997-2000) que falleció en un accidente de tráfico.


10.- Mehmet Okur

Ala-pívot turco que jugó toda su carrera con el trece a la espalda en Detroit Pistons, Utah Jazz, y New Jersey Nets. De aspecto más bien fondón para los canones que se llevan ahora, era un jugador muy listo para sacar ventajas, si era defendido por un jugador más grande aprovechaba su buena mano desde el exterior, y si lo era por un jugador más pequeño aprovechaba su tamaño para postear.


Formó parte del equipo campeón de los Detroit Pistons en 2004, y jugó el partido “All Star” en 2007.

9.- Dave Twardzik

Base discreto que jugó toda su carrera con el trece a la espalda, debutó como profesional en la ABA (Virginia Squires) donde jugaría el partido “All Star” en 1975. Luego de desaparecer la liga del balón tricolor pasó a engrosar las filas del equipo que le eligió en el draft de la NBA, los Portland Trail Blazers.

Ejerciendo de sexto hombre y aportando 11 puntos por partido en playoffs, Twardzik ganó el campeonato en 1977 con los Blazers de Bill Walton:


El equipo de Oregon le homenajeó retirando el número trece en su honor.

8.- James Silas

Base al igual que Twardzik, también jugó toda su trayectoria profesional con el trece, debutando en la ABA con Dallas Chaparrals para después desarrollar sus mejores años en los San Antonio Spurs, primero en la ABA y luego en la NBA.

Seleccionado en el quinteto rookie de la ABA en 1973, jugó dos veces el partido “All Star” de esta liga (1975 y 1976), y fue elegido para el mejor quinteto de la temporada en 1976).

Los Spurs rindieron tributo a Silas con la retirada de su número trece, y en 1997 con motivo del treinta aniversario del nacimiento de la ABA fue seleccionado entre los treinta mejores jugadores de la historia de aquella liga.


7.- Sarunas Marciulionis

Uno de los pioneros europeos abriendo camino para la apertura total de la NBA a los jugadores del viejo continente, el lituano fue objeto de deseo de la liga tras la exitosa medalla de oro de la Unión Soviética en los Juegos Olímpicos de Seúl (1988).

Base-escolta zurdo de explosivas piernas, jugó con el trece en su debut NBA de la mano de los Golden State Warriors, coincidiendo allí con el famoso trío Run TMC (Tim Hardaway, Mitch Richmond y Chris Mullin), donde jugó su mejor baloncesto (15 puntos por partido).


Además del mencionado oro olímpico, luego con la selección de Lituania conseguiría las medallas de bronce en los juegos de Barcelona (1992) y Atlanta (1996). Ingresó en el “Hall of Fame” del baloncesto en 2014.

6.- Glenn Robinson

Alero con gran facilidad para anotar que destacó por su tiro de media distancia, jugó sus mejores años en la NBA con el número trece para los Milwaukee Bucks, con los que promedió veintiún puntos por partido en ocho temporadas.

Sin embargo su mayor logro colectivo lo consiguió ganando el título de la NBA con San Antonio Spurs con una participación testimonial en su última temporada en la liga (2004-05).


Jugó el partido “All Star” en dos ocasiones (2000 y 2001) y fue seleccionado para formar parte del mejor quinteto rookie en su año como debutante en la liga (1995).

5.- Joakim Noah

Pívot en activo, antes en los Chicago Bulls y ahora en los New York Knicks, tal vez sorprenda su presencia en este ranking, pero lo cierto es que su juego en ocasiones tosco no reduce sus habilidades que se demuestran con su visión del juego y su capacidad de pase, a lo que añade su agresividad defensiva.

El jugador francés ha tenido sus mejores años hasta el momento en las temporadas 2012-13 y 2013-14 jugado los partidos “All Star”, siendo seleccionado para el mejor quinteto defensivo de aquellos años, y ganando el premio al mejor defensor de la liga en 2014, año en el que formo parte del mejor quinteto de la liga.


4.- Mark Jackson

Base cerebral en la dirección de juego, destacó por su visión y habilidad en el pase. Jackson jugó la mayor parte de su carrera con el número trece, destacando sus primeros años con los Knicks y su etapa en los Pacers.


Rookie del año en 1988, desarrollo un juego espectacular en los New York Knicks junto a Pat Ewing bajo la batuta de Rick Pitino en la banda. Luego alcanzó el status “All Star” en 1989, y lideró la liga en asistencias en 1997 jugando para Denver Nuggets y los Indiana Pacers. Cuarto mejor pasador total de la historia con más de diez mil asistencias, fue subcampeón de la NBA en el año 2000 con los Pacers.


3.- James Harden


El jugador de los Houston Rockets tiene en el ataque su mejor virtud. Escolta anotador zurdo, es capaz de encestar desde cualquier zona del campo, ya sea con tiros lejanos o forzando penetraciones a canasta en las que suele sacar jugadas de canasta y personal. Y este curso está añadiendo el pase a su catálogo de juego gracias a que está jugando de base a las órdenes de Mike D´Antoni, y hasta ahora está entre los mejores "asistentes" de la temporada.

Su facilidad para la ofensiva le convierte en uno de los jugadores más agradables de ver para cualquier aficionado en la actualidad:


Seleccionado en el segundo quinteto rookie en su temporada como novato, luego fue elegido mejor sexto hombre en 2012 jugando para los Oklahoma City Thunder con quienes alcanzaría las finales.

Ha jugado cuatro partidos “All Star” (2013-16) y ha sido seleccionado en el quinteto ideal de la liga dos veces (2014 y 2015). Ganó el oro olímpico con la selección estadounidense en Londres (2012), e igualmente la medalla de oro en el campeonato del mundo (2014).

2.- Steve Nash


El base canadiense jugó con el número trece en los Dallas Mavericks y los Phoenix Suns. Con éstos últimos desarrolló su mejor baloncesto con Mike D´Antoni de entrenador, en unos Suns que se caracterizaron por un juego ofensivo rápido basado en posesiones cortas. Catalizador de este juego gracias a su habilidad en el manejo de balón y el pase, y sin desdeñar su acierto en el tiro exterior, las grandes temporadas de su equipo no se vieron compensadas con ningún título de campeón. Sin embargo individualmente su protagonismo le permitió conseguir dos premios consecutivos de MVP de la liga (2005 y 2006).


Seleccionado para jugar el partido “All Star” en doce ocasiones, fue elegido también en tres ocasiones para formar parte del mejor quinteto (2005-07), y lideró la liga en promedio de asistencias por partido en cinco ocasiones, siendo el tercer máximo pasador de la historia con más de diez mil asistencias a lo largo de su carrera.


1.- Wilt Chamberlain


Pívot dominante por excelencia gracias a la abrumadora superioridad física que ejercía en su época sobre el resto de sus rivales (sólo George Mikan y Shaquille O´Neal alcanzaron un dominio igual), además sus habilidades para el juego le llevarían incluso a ser quien más pases de canastas diese en la NBA en 1968 pese a su condición de jugador interior.

Único jugador de la historia de la NBA que tiene retirado su número 13 por tres equipos: Philadelphia 76ers, Golden State Warriors (él jugó en San Francisco) y Los Ángeles Lakers. A los que habría que añadir a los Harlem Globetrotters para quienes jugó una temporada antes de acceder a la NBA, y que retiraron su número en el año 2000.

Hombre récord por antonomasia de la NBA con multitud de marcas históricas tanto en anotación como en rebotes. Máximo reboteador total de la historia y mejor promedio de rebotes por partido (23), consiguió los inalcanzables 100 puntos en un partido, y 55 rebotes en otro.

Ganó el premio al mejor rookie (1959-60), y además en su año de debut en la NBA fue elegido MVP del partido “All Star” (fue seleccionado para jugarlo en trece ocasiones) y MVP de la temporada (ganaría tres premios más).

Campeón de la NBA en dos ocasiones (Philadelphia 76ers en 1967 y Los Ángeles Lakers en 1972) siendo elegido MVP de las finales en 1972.

Seleccionado entre los mejores cincuenta jugadores de la NBA con motivo del cincuentenario de la liga en 1996, forma parte del “Hall of Fame” del baloncesto desde 1978.

Jugador de otro tiempo, pocos han visto jugar a uno de los mejores jugadores de la historia (más allá del número de su camiseta), así que disfruten de una hora del baloncesto de Wilt Chamberlain:

Leer más

domingo, 4 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (22) Grizzlies 103 Lakers 100

Por Jorge

Oportunidad perdida. Memphis con muchas bajas (Conley, Parsons, Carter, Randolph) podía ser una buena plaza para que Lakers volviese al 50% y mejorase esta desastrosa gira foránea, pese a sus también numerosas bajas (Russell, Young, Nance y Calderón durante el partido). Y por momentos pareció que esa posibilidad se haría real, pero la magia de Lou Williams (40 puntos) no fue suficiente.


Memphis no es equipo que siga ni de lejos, más allá de los “highlights” puntuales de alguna exhibición de Marc Gasol (por cierto, 5,5 rebotes por partido para él son lamentables), y al ver su quinteto inicial aluciné en colores viendo algunos de sus desconocidos nombres. Y hete aquí que te encuentras con la agradable sorpresa de Troy Williams que aprovechándose de las bajas hizo el partido de su vida (otro que hacen “internacional” los Lakers), enchufando de todos los colores: 31 puntos (23 en la primera parte) con 6 de 12 en triples. Unido a eso, el buen hacer de Gasol y Green en ataque y las pérdidas de balón de los angelinos (el problema no es perderlos sino los contraataques y puntos fáciles que suponen), bastó para que los Grizzlies sumaran otra victoria.

En Lakers sólo hicieron frente el mencionado Williams, que mantuvo al equipo anotando 28 puntos en la primera parte (21 en el segundo cuarto), Deng haciendo su mejor partido de la temporada (18 puntos) aunque errático como siempre en el tiro de tres (increíble la cantidad de tiros cortos que hace), y Mozgov que hizo una aceptable segunda parte escarbando en la zona de Memphis.

Primer bache serio de la temporada para los Lakers, no por resultados que son mejores de lo que su juego es por momentos, y cuyas lesiones no ayudarán a salir de él si no hacen una mejor lectura del juego (Clarkson está muy perdido respecto del que inició el curso), mejorando la circulación del balón y sobre todo aplicándose más en defensa.

Leer más

sábado, 3 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (21) Raptors 113 Lakers 80

Por Jorge


El partido se puede resumir en los últimos 6.9 segundos de la primera parte. Raptors tiene la posesión y su entrenador pide tiempo muerto para preparar el ataque. Y un sencillo bloqueo en la cabecera libera a su base que anota un tiro cómodo de media distancia. Curiosamente quien puntea ese tiro es el mejor defensor del equipo, Larry Nance jr., o por lo menos el que más ganas le pone, que para eso de la defensa es importante.

En el segundo cuarto Toronto anotó 18 de 23 tiros de campo incluido un estupendo 5 de 7 desde el triple. Y sin quitar mérito al buen hacer del equipo canadiense, contra esa defensa hasta a mí me hacían internacional. Ni siquiera son capaces de endurecer el partido, de repartir algún estacazo que otro (sólo tres faltas en ese tiempo), y así el camino es muy plácido para cualquier rival, y más para un buen equipo como los Raptors.

Los Lakers que aguantaron en el primer cuarto (28-22) trataron de mantenerse luego en el partido gracias al rebote de ataque (19) y las segundas oportunidades, pero desacertados en el tiro y con una circulación pésima del balón, lo único que te puede ayudar es una defensa que apenas existió a lo largo de esta temporada salvo en contados y breves periodos de tiempo de algunos partidos.

Toronto no necesitó la aportación de su mejor jugador, un DeRozan muy desacertado (6 de 18 en tiros), y le bastó con juego de equipo para anotar los tiros abiertos, y la dirección y anotación de Lowry, el mejor del partido con 24 puntos (6 de 9 en triples).

En los Lakers lo único positivo fue que Ingram sigue su rodaje como rookie y anoche hizo su récord anotador (17 puntos) con un , ¡oh, milagro!, una buena serie en el tiro (8 de 16).

En días como hoy, la mejor noticia es que nadie daba un duro por L.A. y con un cuarto de temporada jugado, diez victorias son muchas a estas alturas y el equipo se mantiene en la pelea por alcanzar los playoffs. Algo impensable ni tan siquiera para los seguidores más optimistas.

Leer más

viernes, 2 de diciembre de 2016

Mejora tu juego (14): Aro pasado

Por Jorge

Una de las primeras enseñanzas que cualquier entrenador de baloncesto realiza con los más jóvenes es la ejecución de la entrada a canasta. Cualquier niño al que le das una pelota quiere botarla y por supuesto tirarla a canasta, y para satisfacer esa querencia, nada mejor que enseñarle a botar hacia el aro para hacer una entrada. Inicialmente la coordinación de los pasos es la mayor dificultad, y no digamos ya hacerlo por el lado/mano no dominante.

Cuando los jóvenes tienen cierto dominio de la entrada básica a canasta, cualquier variante que se añada es vista como algo increíble por su dificultad. Y entre esas opciones encontramos el aro pasado.

No hay entrenador que no haya visto en el inicio de la enseñanza de este tipo de entrada, tiros a cual más variopintos y raros. Y el caso es que más allá de la finalización (el gesto final del tiro), que exige un movimiento de muñeca concreto, y sin entrar en multitud de detalles (cómo subir el balón y su protección, cómo marcar los pasos frente a rivales, si se hace a mano/pie cambiado, la aproximación al aro dependiendo de la zona del campo por la que se ataque, etc.), lo cierto es que lo primero que hay que dejar claro a los jugadores es que esta entrada, en su versión sencilla, es igual que una entrada normal en cuanto al apoyo de los pasos, es decir, derecha-izquierda y rodilla derecha arriba en el caso de aproximarse al aro por la derecha, y al revés si se hace por la izquierda. La única diferencia es que la finalización en vez de realizarla por delante del aro, se hace dejando la pelota por detrás.

En el siguiente vídeo se pueden ver diferentes acciones a aro pasado:


El dominio de esta entrada/tiro permite anotar una vez que se deja atrás a un defensor que sale al camino del atacante que impide que anote de primeras.

Cualquier aficionado/jugador que quiera mejorar en estas entradas, puede fijarse y practicar primero sin defensa, para que una vez tenga dominada la coordinación y finalización en el tiro, luego pueda atreverse a hacerlas en juego real.

Ahora bien, un detalle que conviene tener claro es que la práctica de estas entradas con defensa no dependen de uno mismo, y es que como para cualquier acción, finalizar o no a aro pasado será decisión que se tenga que tomar dependiendo de la situación real de juego. Porque una cosa es la técnica individual que se posea y otra la aplicación que de ésta se haga en función del juego (táctica individual). Y es que en alguna ocasión me tope con jugadores que aprendiendo, querían hacer una entrada a aro pasado en los partidos a toda costa, dándoles igual la disposición de la defensa y las opciones del resto de atacantes, de tal manera que mejor no cuento que jugadas más rocambolescas se daban en algunos ataques.

Leer más

jueves, 1 de diciembre de 2016

El lagunero opina… (20) Bulls 90 Lakers 96

Por Jorge


Lakers ganó un partido de los que suman al final de temporada camino quien sabe si de playoffs. Mal juego de ambos equipos en un partido caracterizado por los pobres porcentajes de tiro y la multitud de pérdidas de balón, especialmente sangrante en el equipo de Luke Walton (23).

El titular son los 20 rebotes de Randle, encomiable su labor bajo los aros, pero con 4 de 13 en tiros fallando multitud de ellos dentro de la zona, atascado entre fintas y contactos con los adversarios. El curso pasado el legendario James Worthy se dedicó a aleccionar a los jóvenes jugadores interiores de L.A., pero éste no aprendió mucho o no lo pone en práctica, pues esos fallos en la pintura no son algo nuevo.

¿Por qué Calderón apenas dirige al equipo y cede buena parte de ese protagonismo al propio Randle y a Ingram (hoy titular por las lesiones)? En la NBA cualquiera puede subir la bola, pero amigo, dirigir es otra cosa, y en este una vez me toca a mí otra vez te toca a ti, me parece que Calderón se contagia y le lleva a cometer más errores de los que sería habitual en él. Incluso me atrevería a decir que tampoco es todo lo agresivo que podría en ataque con el balón para aprovechar su buena mano, y es que cuando se pone puede sumar, como hizo anoche en el inicio de la segunda parte atacando a Rondo.

Volviendo al tema del manejo de balón, nadie duda de que es aceptable en los casos de Ingram y Randle, pero darle el balón, sobre todo a este último, para que dirija el ataque es poco menos que una lotería, y sólo en transición le concedo opciones por la velocidad que le permite ganar ventaja de sus pares.

Por último, dar un palito a los jugadores o a quienes les hacen el scouting porque no entiendo como no se flotaba más a Butler, Wade y Rondo (aunque este estuvo sorprendentemente acertado con 2 de 3 en triples) cuando sabido es que no meten una en una piscina (para prueba el 1 de 6 de Butler con un “air ball” en el tiro que buscaba el empate al final del partido). Y sí, ya sabemos que en la NBA cualquiera la puede enchufar, pero dado que no se puede defender todo, y que éstos son muy peligrosos de camino al aro, ¿cómo es posible que se salga a todos sus tiros e incluso se pique en sus fintas de tiro? Por cierto, tengo para todos, lo de los Bulls es de locos. No juegan a nada y en esas circunstancias no entiendo como no juega más Mirotic.

Más allá de estos detalles, otra vez el banquillo le salvó la papeleta a los titulares, y es que debe ser frustrante para jugadores como Nance y Williams que tengan que salir con el marcador abajo (28-17 al final del primer cuarto) para meter al equipo en el partido (47-47 al descanso), para que nuevamente los titulares la caguen y tengan que volver a arreglarlo otra vez.

Anoche nuevamente Nance fue el empuje defensivo (12 puntos y 11 rebotes) que complementó el ofensivo de Williams (18 puntos), y que remató Clarkson con varias canastas muy importantes en el último cuarto para certificar esta importante victoria.

Leer más